En España 4,7 millones de personas viven solas, de las que casi 2,8 millones están en edades comprendidas entre 18 y 65 años, por tanto con posibilidades de trabajar y, por supuesto, en la situación actual, muchas de ellas teniéndolo que hacer a través del trabajo a distancia.

El teletrabajo supone en sí mismo un escenario de trabajo en solitario, ya que limita las relaciones sociales que se establecen en los lugares de trabajo (comentarios en el café de la mañana, contactos informales…) y que tan importantes son para gestionar adecuadamente los riesgos psicosociales.

Por ello si sumamos las dos situaciones, es decir soledad por un lado y teletrabajo por otro aparecen una serie de problemas que es preciso tener en cuenta para obtener una adecuada gestión del trabajo a distancia.

Con el objetivo de proponer unas recomendaciones para la gestión del teletrabajo en solitario, Asepeyo presenta la publicación “Teletrabajo solitario en confinamiento. Buenas prácticas para la prevención de riesgos psicosociales” donde se exponen desde las ventajas e inconvenientes que esta situación plantea hasta sus consecuencias.

Al final del documento se plantean una serie de buenas prácticas preventivas que deben tener presentes tanto las empresas como los trabajadores para conseguir que el teletrabajo en solitario no genere problemas psicosociales en su implantación.

Puede descargarse el documento:

https://prevencion.asepeyo.es/documento/teletrabajo-solitario-en-confinamiento-buenas-practicas/