Cómo gestionar la prevención en las actividades de transporte y reparto a domicilio

Asepeyo ha publicado un código de buenas prácticas, destinado a ayudar a las empresas y profesionales del transporte y reparto a domicilio en la gestión de la prevención de riesgos laborales.

La actividad de reparto de pequeña paquetería hace tiempo que existe, aunque ha sido en los últimos años, y especialmente tras la crisis de la Covid-19, cuando ha aumentado de manera exponencial. Inicialmente estaba centrada en el reparto mediante pequeños camiones y furgonetas, pero el avance de la tecnología de la información y las comunicaciones ha provocado un cambio en los hábitos del consumidor, afectando a las características del sector.

En la actualidad el consumidor hace un uso más intensivo de la compra sin desplazamiento, tanto de productos y servicios como de restauración. Todo ello ha provocado, en especial en las grandes ciudades, que los comercios amplíen la venta tradicional con la modalidad en línea.

Todo este nuevo paradigma provoca un aumento del número de desplazamientos en las vías urbanas, con presencia de nuevos vehículos de transporte (motocicletas, bicicletas y patinetes), muchos de ellos en franjas horarias concretas.

En paralelo, el avance en la tecnología de obtención y gestión de datos, a través del desarrollo de métodos de cálculo matemáticos o algoritmos aplicados a las relaciones de trabajo, han revolucionado la manera en cómo se prestan los servicios, optimizando recursos y resultados.

Todos estos factores, si no conllevan una correcta gestión y una correcta adopción de las medidas de prevención adecuadas, pueden comportar un aumento del riesgo de sufrir un accidente laboral.

Código de buenas prácticas en PRL

La mutua Asepeyo, con su constante interés para fomentar la prevención de riesgos laborales entre las empresas y sus trabajadores, ha elaborado un código de buenas prácticas para ayudar a gestionar la prevención en las actividades de transporte y reparto a domicilio.

En este documento se recogen aquellos aspectos que deben tenerse en cuenta en las actividades de distribución y reparto a domicilio para garantizar la seguridad, salud y bienestar de las personas, con el objetivo común de reducir la siniestralidad laboral vial, y tener una ocupación de calidad que garantice un trabajo digno y haga a las empresas más competitivas, saludables y sostenibles.

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